Años después de la sanción de la Ley Provincial Nº 13.868 y la Ordenanza Municipal Nº 2513/18, que prohíben el uso de bolsas de polietileno en comercios, se observa que muchos establecimientos continúan entregándolas a los clientes. Esta situación pone en evidencia la falta de control por parte del área de Producción y Medio Ambiente del municipio, encargada de garantizar el cumplimiento de la normativa.

La ordenanza establece un plazo máximo de 12 meses desde su promulgación para la eliminación progresiva de estas bolsas en los distintos rubros comerciales. El cronograma fijado era el siguiente:

Hipermercados, supermercados, minimercados y autoservicios: 6 meses.

Kioscos, fiambrerías, panaderías, carnicerías, pescaderías, pizzerías, heladerías y casas de comida para llevar: 9 meses.

Comercios en general: 12 meses.

Sin embargo, la falta de campañas de concientización y controles adecuados ha permitido que esta práctica continúe, perjudicando el medio ambiente y retrasando el cambio de hábitos en la comunidad.

Ante esta situación, resulta fundamental que las autoridades refuercen las medidas de difusión y control. Una estrategia efectiva podría incluir la distribución de folletería en comercios, así como la aplicación de sanciones para quienes no cumplan con la normativa.

El compromiso de comerciantes y consumidores es clave para reducir el impacto ambiental de los residuos plásticos. Respetar la ley y adoptar alternativas sustentables, como bolsas reutilizables, es un paso necesario hacia un distrito más ecológico y responsable.