Hace unos días, en Salta, el señor de la foto fue agredido por una patota y su perro lo defendió, sin embargo sufrió lesiones. Cuando llego la ambulancia, su fiel compañero no quiso abandonarlo y se trepó junto a él.
Al llegar al Hospital San Bernardo, el perrito también lo acompañó, no lograron impedir su ingreso, no hubo manera de que el perrito se alejara de su humano, lo acompañó debajo de la camilla hasta que le hicieron las curaciones y permaneció junto a él hasta que le dieron el alta y se fueron juntos.
Nunca lo abandonó, estuvo con el todo el tiempo.
Médicos del San Bernardo nos enviaron la foto y nos contaron la historia. Les agradecemos por haber permitido que este fiel amiguito acompañara dentro del hospital a su humano. Un ejemplo más de la fidelidad, amor y compañerismo que nos demuestran los animales. Son un ejemplo de nobleza.
Fuente: Campana Informa